El jugador del Dos Hermanas Emasesa Antonio Jesús Fernández ha terminado la Primera Nacional masculina de waterpolo en la segunda plaza en la tabla de goleadores con 49 tantos. Este malagueño de 22 años ha sido clave en este equipo que logró la permanencia en la última jornada. Fernández sueña con ver de nuevo a un equipo andaluz en la máxima categoría masculina de este deporte, pues ya participó el Sevilla Emasesa.
-¿Cómo vivieron el final de liga con el equipo jugándose la permanencia?
-Pues con los nervios a flor de piel. Parecía casi imposible la permanencia, pero a medida que íbamos superando partidos vimos más cerca el objetivo.
-Esta temporada ha marcado muchos goles ¿Cómo se ha visto con el paso de los partidos?
-Pienso que he ido de menos a más durante la liga. No ha sido fácil el hecho de llegar al Dos Hermanas y querer hacerlo igual que lo hacía con mi antiguo equipo, el Club Waterpolo Marbella. Aquí había que adaptarse a otro estilo de juego, más lento en ataque pero muy duro en defensa. Es cierto que he metido bastantes goles pero al fin y al cabo soy de los que más tira a portería. Alguno tendré que meter.
-Sevilla Emasesa, Málaga, Caballa y Dos Hermanas han compartido liga en esta campaña ¿Qué le ha parecido que haya tanto equipos pertenecientes a la FAN en la segunda categoría nacional?
-Me parece genial, porque se está viendo poco a poco el trabajo que se está haciendo en Andalucía. Pienso que hay que seguir así. Algún día quién sabe si habrá equipos de Andalucía en División de Honor masculina. Solo hay que tener paciencia y seguir trabajando duro, que al final llegará.
-¿La disputa de tantos derbis les ha dado unas dosis extras de motivación?
-Al fin y al cabo llevamos viéndonos las caras todos los equipos desde que jugábamos en categorías inferiores. Creo que todos los equipos andaluces nos conocemos a la perfección. Son partidos más reñidos y divertidos.
-Dos Hermanas fue la sede en noviembre de un partido de la Liga Mundial femenina ¿Qué aporta a un club como el suyo este tipo de eventos?
-Fue un evento espectacular. No todos los jugadores tienen la suerte de ver a su selección jugar un partido. Este tipo de cosas hacen que mucha gente se desplace para ver waterpolo. Sobre todo sirve a los más jóvenes de los clubes, que son los que más disfrutan viendo partidos de este nivel.
